Kamishibai 3

En este taller, además de la realización de la historia como se describe en las dos actividades anteriores (kamishibai 1 e kamishibai 2), lo más destacado es la construcción de un verdadero «teatro de cartón». Se invita a los niños a confrontarse con la creación desde cero de un objeto de artesanía, requiriendo tanto la fase proyectual de diseño y medida como la realizativa de corte, pegado y decoración. Al igual que los dos talleres ya citados, también en este caso las instancias pedagógicas se refieren a la conciencia de los puntos fuertes y débiles, a la iniciativa en el proyecto y a la colaboración en grupo. En cuanto a la didáctica, junto a la creatividad en el plano narrativo y figurativo se añade la manualidad en la construcción.

Desarrollo

1) Proyecto

Tomando como modelo mi kamishibai los niños dibujan en los cartones de recuperación los cortes para realizar el proscenio, el trasfondo y las escenas del «teatro de papel». Se trata de una fase insospechadamente importante desde un punto de vista pedagógico. Una operación en apariencia ordinaria y mecánica, como reportar medidas, da mucho espacio a la creatividad e inventiva necesaria para adaptar el diseño a los materiales disponibles. Nuestra tarea como adultos es encontrar el justo equilibrio entre el instinto de ayudarlos y el papel de la educadora que debe intervenir lo menos posible.

2) Ejecución

En esta etapa, la acción se centra en cortar y ensamblar las diferentes piezas de cartón que componen el kamishibai. Se decide en grupo el procedimiento a seguir después con la misma atención que se dedicaría a las instrucciones de montaje de la sorpresa de un huevo Kinder se procede. La colaboración dentro del grupo está en esta etapa fundamental.

3) Decoración

Dependiendo de la ocasión, las decoraciones pueden ser libres o seguir el tema de la historia creada en el taller. Teniendo a disposición también tela, cuentas o otros adornos se puede embellecer el kamishibai con estos, de lo contrario los dibujos recortados y pegados serán más que suficientes para hacer única la propia creación. En un contexto escolar, el kamishibai construido en colaboración con los maestros puede usarse para inventar nuevas historias durante las clases.