Los Días de la mirla

El taller creativo para niños sobre los «Días de la mirla» prevé la construcción de pequeños comederos para los pájaros obtenidos de las cáscaras de las naranjas.
Es una actividad divertida y educativa que ayuda a desarrollar la creatividad y la conciencia ambiental de los más pequeños.

Desarrollo

Durante este taller, los niños aprenden a trabajar en equipo y a ser creativos en el uso de las herramientas y materiales a su disposición. Además, también aprenden sobre la importancia de la sostenibilidad y el cuidado del medio ambiente a través de la reutilización de materiales naturales como las cáscaras de naranja.
Esta actividad es una excelente oportunidad para que los niños desarrollen su creatividad, destreza y conciencia ambiental, y también aprendan a cuidar a los animales y la naturaleza. Además, a través del enfoque lúdico y divertido, los niños también aprenden a apreciar las tradiciones y la cultura popular italiana de los «Días de la Mirla».
El taller se divide en dos partes: la primera narrativa y la segunda manual.

La leyenda
Esta primera parte comienza con el relato sobre la tradición de los «Días de la Merla» y una reflexión sobre la importancia de alimentar a los pájaros durante el invierno, cuando los recursos alimenticios escasean.

Construcción
Luego se les pide a los niños que recojan las cáscaras de las naranjas, que se utilizarán para construir los comederos y se les guiará en la creación utilizando las simples instrucciones dadas.
La construcción implica el uso de hilos para colgar los pequeños artefactos y tijeras para hacer los agujeros de paso de los hilos de soporte. Se comienza cavando con una cuchara las naranjas cortadas por la mitad para obtener pequeños recipientes que se convertirán en comederos.
Una vez terminada la preparación, los pequeños comederos se llenarán con pienso a base de semillas de girasol, de lino o de fruta amasada con grasa animal o mantequilla de maní.

Disposición
Una vez terminada la preparación, los niños elegirán dónde colgar los pequeños comederos para los pájaros buscando lugares posiblemente no ocultos por las hojas y lo suficientemente altos para que los pájaros puedan encontrarlos fácilmente y se sientan seguros al acercarse.